Un grupo de senadores de diversas bancadas ingresaron a la Cámara Alta, un proyecto de ley que decreta la obligatoriedad transitoria en la emisión de contenidos educativos para los concesionarios de televisión producto de la pandemia del covid-19, lo que busca fortalecer el rol educativo de la televisión abierta en medio de la crisis sanitaria.

El proyecto de autoría del senador Alejandro Navarro (PRO) y patrocinado por los senadores Jorge Soria (IND), Alejandro García-Huidobro (UDI), Francisco Chahuán (RN) y Jorge Pizarro (DC), tiene un artículo único que señala que, durante la emergencia sanitaria producto de la pandemia del virus COVID-19, “los concesionarios de Servicios de Radiodifusión Televisiva a que hace referencia el Artículo 15° TER de la ley N° 18.838, deberán transmitir diariamente dos bloques de dos horas continuas cada uno, de programas educativos que vayan en refuerzo del aprendizaje del alumnado, alineados al currículum nacional y en apoyo del cumplimiento de los objetivos de enseñanza del sistema educativo y de los programas del Ministerio de Educación”.

Para el autor del proyecto, Alejandro Navarro (PRO), “tal como millones de niñas, niños y adolescentes podrán educarse y crear conciencia con las historias de la Teletón, una vez terminada y volvamos a la programación habitual, debemos poner en debate el rol de la televisión pública, sobretodo en el contenido que todas las mañanas las y los chilenos vemos a diario. Nos preocupa la extensión de los matinales de televisión, que disfrazan su contenido de educativo e informativo, cuando solo vemos espectáculo y actualmente, un show para posicionar a políticos de todos los sectores”.

“Los concesionarios de Servicios de Radiodifusión Televisiva, deben entregar contenido educativo y cultural, tal como lo hacía Teleduc hace años, o como lo hace la BBC en Londres, con Open University, eso buscamos con este proyecto que ha tenido apoyado transversal”, agregó Navarro.

El senador por la región de Biobío enfatizó en que “creemos que los canales de televisión deben destinar al menos dos bloques de dos horas cada día, para impartir programas educativos que vayan en refuerzo del aprendizaje de las y los estudiantes de Chile. La televisión abierta debe jugar un rol colaborativo y dejar de lado la pirotecnia informativa con que hoy copan los televisores de todo el país durante un espacio fundamental como es el horario de la mañana”.