Los ministros de Defensa y del Interior, Baldo Prokurica y Rodrigo Delgado, respectivamente, se han desplazado este jueves a la región de La Araucanía para reunirse con las autoridades locales y evaluar los resultados de la declaración del estado de emergencia hace dos semanas, que ha supuesto la militarización de la zona frente a la violencia.

Las provincias de Arauco, Biobío, Malleco y Cautín, en la propia región de La Araucanía y en la del Biobío, están bajo un estado de emergencia que el Presidente Sebastián Piñera amplió este martes hasta el próximo 11 de noviembre.

Según el Gobierno, ha permitido, en dos semanas, llevar a cabo unos 800 operativos, así como más de 10.000 controles, que han llevado a la detención de 26 personas, según ‘La Tercera’. Además, según La Moneda, se han reducido un 43 por ciento los delitos violentos y se han reducido hasta en un 80 por ciento los ataques incendiarios y las usurpaciones.

La región sur de Chile, donde se concentra la mayor población mapuche, el mayor grupo indígena del país, ha sido escenario de creciente violencia, con enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y ciudadanos que sostienen demandas territoriales históricas.

Mientras esté vigente, el estado de excepción “permite que las Fuerzas Armadas colaboren, pero no que reemplacen a las Fuerzas de Orden y Seguridad, es decir, a Carabineros y la Policía de Investigaciones y, por lo tanto, no podrán participar en forma autónoma y directa en operaciones que son de naturaleza policial”, ha detallado Piñera.